La Caravana de migrantes que partió el sábado de Honduras llegó frente al río Suchiate, donde se organizó una espontánea manifestación por su derecho a migrar; la frontera entre México y Guatemala fue sellada, pero miles de personas se mantienen en el lugar con la esperanza de cruzar hoy
Texto: Rodrigo Soberanes
Fotografías: Javier García
TECÚN UMÁN.- La multitud de la Caravana Migrante se asomó al río que la separa de México con una exhibición de su determinación para cruzar y seguir su camino hacia Estados Unidos, tal como se lo propusieron las miles de personas que el sábado pasado salieron de San Pedro Sula, en el norte de Honduras.
Después de una mañana en la que no se dieron mayores sobresaltos en esta ciudad, fronteriza de Guatemala, donde más de mil migrantes de la Caravana ya están reunidos, el contingente se lanzó a las calles para realizar una manifestación que concluyó en el río Suchiate.
A su paso recibieron muestras de solidaridad de mujeres y hombres habitantes de esa pequeña ciudad que fueron correspondidas con gritos y euforia de quienes marchaban.
“¡No se desanimen, sí lo van a lograr, viva Honduras!”, eran los gritos que se escucharon al paso de la marcha.
Cerca de mil personas, entre ellas un número importante de menores de edad, se instalaron frente al río y su primer impulso fue cantar dos veces el himno nacional de Honduras y lanzar consignas reivindicando su derecho a migrar por el continente americano; sin embargo, la principal arenga fue: “¡no tenemos miedo!”.
Más temprano, del otro lado del río, la Policía Federal había desplegado a sus elementos que fueron traídos desde la Ciudad de México en días pasados para reforzar las labores de seguridad, frente a la inminente llegada de la caravana. Además habían sido colocadas vallas y elementos antimotines en el Puente Internacional.
MIGRANT CARAVAN: Two federal police-filled planes w/anti-riot gear landed near the Mexico/Guatemala border this morn (vid source: Policia Federal de Mexico). pic.twitter.com/UyneeXlPnu
— KarlaZabs (@karlazabs) 17 de octubre de 2018
Cuando la marcha regresaba al centro de Tecún Umán, llegó la noticia de que unas 100 personas hondureñas habían llegado a la orilla del río del lado mexicano y el contingente entero volvió. Entonces sucedió un encuentro frente a frente de los dos contingentes que estaban separados por el río fronterizo.
Se repitieron las consignas y arengas, himnos, saltos y gritos de los dos lados del río Suchiate durante varios minutos antes de que una fuerte tormenta comenzará a dispersar poco a poco la manifestación.
Los últimos tres días han caído aguaceros idénticos a la misma hora en Tecún Umán. Los tres días que lleva aquí la caravana han sido pasados por agua y cientos (ahora miles) han sorteado la lluvia en condiciones sumamente precarias.
Cuando comenzó el aguacero durante la manifestación junto al río, la caravana se resguardó en algunos lugares techados de esa zona y cerca de 20 minutos estuvo esperando a que pasara la lluvia torrencial.
Antes de que pasara la lluvia, se desató un torrente de euforia en un grupo que sugirió ir, de una vez, al puente fronterizo y no seguir esperando más al grueso del contingente que poco a poco se acerca a Tecún Umán. Fue entonces cuando cruzaron las cortinas de agua y cruzaron las calles inundadas de Tecún Umán con el agua hasta las rodillas en algunos tramos.
El impulso resultó en un amago de cruzar el Puente Internacional que fue detenido por la Policía Nacional de Guatemala, cuyos elementos cerraron la reja y se desplegaron en fila con armas largas de alto poder.
El contingente se reunió finalmente en el parque central donde había más agitación que antes de la manifestación por la llegada constante de nuevos contingentes de migrantes que salieron de sus casas con la Caravana de Migrantes.
También comenzó a correr la noticia de la detención del activista Irineo Mujica, quien había acompañado la marcha que llegó a la orilla del río del lado de México. El integrante de la organización Pueblos sin Fronteras fue asegurado por elementos del Instituto Nacional de Migración y puesto a disposición de la Procuraduría General de la República ante la mirada de decenas de migrantes.
Antes de caer la noche, el parque central de Tecún Umán era ya una romería con miles de personas y esbozaba la magnitud del fenómeno migratorio sin precedentes que está ocurriendo desde el pasado sábado.
“Nunca vimos nada así antes”, dijo un operador de las balsas que cruzan cada día el río Suchiate con viajeros y mercancías. Y un compañero suyo coincidía en esa apreciación y se quejaba del rechazo que se ha percibido hacia la caravana en “el lado mexicano”.
Cuando amainó el aguacero comenzó a volver la calma al tiempo que muchos niños se iban quedando dormido en brazos de sus madres, enseñando sus piernitas colgando bajo las bolsas de plástico que consiguieron para protegerlos del agua.
“Mañana cruzamos”, repetían decenas de personas entre el jolgorio de la plaza central de Tecún Umán.
Consulta nuestra cobertura:
Caravana Migrante: entre el refugio y la policía
El éxodo migratorio inició en agosto
Llegan los primeros migrantes hondureños a la frontera
Caravana Migrante topará con cerco policíaco de México
México y Guatemala cierran paso a caravana de migrantes hondureños
Tags: caravana migrante, frontera sur, hondureños, migrantes, TRUMP