La Fiscalía de Coahuila admitió que un migrante hondureño murió por disparos de agentes de la dependencia, en un supuesto operativo contra un grupo de narcomenudistas, y que los agentes se encuentran bajo investigación. El centroamericano cayó malherido frente a su hija de 8 años de edad
Texto: Redacción Pie de Página
Fotos: Archivo / Duilio Rodríguez
La Fiscalía de Coahuila admitió que un migrante hondureño fue asesinado por agentes ministeriales la noche del miércoles en las vías del tren de Satillo, por lo que los seis elementos, sin estar detenidos, se encuentran bajo investigación.
El fiscal Gerardo Márquez informó que los policías se encuentran concentrados en la Dirección General de la Policía de Investigación Criminal del Estado.
El funcionario informó que los hechos ocurrieron durante un operativo contra el narcomenudeo, en el que dos presuntos delincuentes huyeron hacia las vías de tren donde se encontraban los migrantes.
La Fiscalía cambió su versión, ya que en un primer comunicado informó que la madrugada del jueves 1 de agosto que cuatro hombres habían agredido verbalmente a los policías y uno de ellos sacó un arma y realizó disparos, por lo que los agentes se defendieron y lo abatieron.
“Cuatro personas del sexo masculino agreden verbalmente a los policías. Uno de ellos aca de entre sus ropas un arma de fuego y realiza disparos. Los oficiales repelen la agresión con sus armas de cargo por lo que el agresor cae abatido”.
En una carta, la Casa del Migrante de Saltillo señaló este jueves que el asesinato del migrante, incialmente identificado como proveniente de El Salvador, ocurrió en un operativo donde participaron elementos del Instituto Nacional de Migración y la Policía Federal, además de la Fiscalía de Coahuila.
El gobierno federal negó más tarde que las dependencias federales se encontraran en el operativo y atribuyó los hechos a la Fiscalía coahuilense.
El migrante asesinado fue identificado como Marco Tulio Perdomo Guzmán, quien viajaba acompañado de su hija de 8 años de edad ante quien cayó malherido tras el disparo de los ministeriales.
Marco Tulio tenía 29 años de edad y había pasado una semana en la Casa del Migrante de Saltillo, de acuerdo con una entrevista para El Heraldo TV ofrecida por el director del albergue, Alberto Xicoténcatl.
En conferencia de prensa, el fiscal afirmó que en el lugar del homicidio fue encontrada una arma de fuego pero no que no pueden aún determinar que haya sido usada por el migrante asesinado.
La versión de un migrante entrevistado por medios locales, que se encontraba en el mismo grupo que Marco Tulio, señala que los agentes dispararon contra el grupo sin ningún ataque previo.
Las vías del tren donde fue asesinado el hondureño se encuentran aproximadamente a un kilómetro de distancia de la Casa del Migrante de Saltillo, cuyo director, Alberto Xicoténcatl, denunció el 23 de julio pasado operativos antimigrantes por parte de autoridades federales en los alrededores del albergue, además de amenazas por parte de la Policía Federal de realizar verificaciones migratorias dentro de las instalaciones del lugar, ambas cosas prohibidas.
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