Este lunes un segundo grupo de migrantes que buscan refugio atravesó el río Suchiate. Nuevamente enfrentaron resistencia y agresiones por parte de los agentes de seguridad mexicanos, que sobrevolaron un helicóptero sobre el río poniendo en riesgo la vida de las personas que cruzaban
Texto: Ángeles Mariscal / Chiapas Paralelo
Fotos: Danirel Zacarías / Chiapas Paralelo
TAPACHULA, CHIAPAS.- A nado, agarrados unos con otros, unos dos mil migrantes de quienes integran la segunda caravana, cruzó el río Suchiate, frontera de Guatemala con México. El lunes, alrededor de las 9 de la mañana, se colocaron a la orilla del río. Entrelazaron sus brazos para formar una valla humana formada por hombres, mujeres y niños, y avanzaron lentamente por el río.
A medio afluente, lanchas conducidas por personal de la Secretaría de Marina les cortó el paso. Con altavoces les pidieron regresar, advirtiéndoles que si ingresaban estaban cometiendo un delito.
Ahí los contuvieron durante al menos dos horas. Las mujeres y hombres que llevaban a sus niños en brazos, les pidieron dejarlos avanzar, porque la corriente del agua los empezaba a arrastrar y un helicóptero que sobrevoló sobre ellos en todo momento, los ponía en riesgo de ahogarse.
Las autoridades mexicanas decidieron dejarlos continuar si aceptaban ser llevados a lo que les dijeron es un albergue. Al llegar a la orilla del río del lado mexicano, fueron cercados por policías federales y agentes del INM, quienes los condujeron a una bodega para que realizaran su solicitud.
De acuerdo a la propuesta del programa “Estás en tu casa” anunciado por el presidente Enrique Peña Nieto, los migrantes podrán solicitar el estatus de refugiado, permanecer en el estado donde realicen la petición -en este caso Chiapas-, hasta que la Comisión Mexicana de Atención a Refugiados (COMAR) resuelva la petición. De ser negado el estatus, serían repatriados a su país de origen. Si se niegan a presentar la solicitud ante la COMAR y son detenidos, también serán repatriados.
Por estas razones, una vez que llegaron a la bodega, los migrantes se impusieron sobre el personal que cuidaba la entrada, y decidieron emprender su camino rumbo a Estados Unidos.
Ahorita mismo están caminando por la carretera Panamericana, para encontrarse con la primer caravana y continuar juntos el viaje.
Esta segunda caravana es la que el pasado domingo se enfrentó con la Policía Nacional de Guatemala y posteriormente con la Federal de México para intentar abrir las puertas del puente fronterizo, resultado de lo cual el migrante Henry Adalid Díaz Reyes murió presuntamente por el impacto de una bala de goma que lanzaron autoridades mexicanas.
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